El ministro de Exteriores iraní, Abbas Araghchi, dijo que Irán solo regresará a la mesa de negociaciones cuando haya dado una “respuesta” al ataque perpetrado por Estados Unidos contra sus instalaciones nucleares, cuando la “agresión estadounidense e israelí” sobre su territorio se detenga, señaló. El funcionario advirtió por la respuesta de Teherán: “Tenemos variedad de opciones”, expresó.
En ese sentido, Araghchi sostivo que Estados Unidos e Israel cruzaron una gran línea roja al atacar las instalaciones nucleares de Irán: "No hay línea roja que no hayan cruzado. Y la última, y la más peligrosa, ocurrió anoche. Cruzaron una línea roja muy grande al atacar las instalaciones nucleares", dijo.
En una rueda de prensa, en el marco de la reunión de ministros de Exteriores de la Organización para la Cooperación Islámica (OCI), Araghchi dijo este domingo que todos los llamamientos que se le hacen a Irán para que retome la vía diplomática resultan “irrelevantes” puesto que el inicio de los bombardeos israelíes sobre su territorio se produjo precisamente cuando Teherán negociaba con Washington un eventual acuerdo nuclear, y el ataque estadounidense se ha producido justo dos días después de que el jefe de la diplomacia iraní se reuniera con representantes de la Unión Europea (UE) en Suiza para tratar de hallar una salida negociada a la crisis.
"Todavía no tengo información exacta sobre el nivel de los daños, pero no creo que importe. El ataque de anoche fue un grave delito", dijo el ministro. "A través de esta acción, Estados Unidos dio un golpe grave a la paz y la seguridad internacionales", afirmó el funcionario iraní, prometiendo que Irán se defendería "por todos los medios necesarios" contra la agresión militar estadounidense.
"El mundo no debe olvidar que fue Estados Unidos el que, en medio de un proceso para lograr una solución diplomática, traicionó a la diplomacia al apoyar el lanzamiento por parte del régimen genocida israelí de una guerra ilegal de agresión contra la nación iraní", dijo.
El ministro iraní exigió que el Consejo de Seguridad de la ONU se reúna de forma inmediata para condenar el ataque de Estados Unidos y anunció que esta tarde volará de Estambul a Moscú para reunirse mañana con el presidente ruso, Vladímir Putin, y “coordinar posiciones”.